ALGUNAS REFLEXIONES SOBRE LA VISITA DEL PAPA BENEDICTO XVI A BARCELONA PARA BENDECIR EL TEMPLO DE LA SAGRADA FAMILIA (2ª parte)

Expuse en el anterior escrito en este BLOG algunas reflexiones sobre la inauguración del Templo de la Sagrada Familia de Barcelona. Deseaba terminar mi reflexión hace ya días pero diversos motivos me lo han impedido. Lo que ahora sigue fue escrito pocas horas antes de la antes de la venida del papa a Barcelona, pero lo dividí en dos partes sin acabar de terminar la segunda hasta hoy, casi dos semanas después… Ahora presento la segunda y en breve (espero ser cumplidor en esta ocasión) presentaré alguna reflexión a lo ocurrido el 7 de noviembre. (Puede encontrarse un resumen de lo dicho en la parte 1ª al inicio de dicho escrito).

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Otra cuestión es, simplemente, la que atañe al conocimiento del lugar, de la ciudad, de nuestro arte y de nuestra cultura así como de nuestra historia. Se comentaba no hace mucho por algunos entendidos en el tema -así lo oí con datos y explicaciones que parecían concluyentes- que no habría manera de pagar, ni con 5 o 10 veces más del presupuesto de este viaje, lo que va a significar en el mundo entero la visión por más de mil millones de espectadores del lugar más emblemático y famoso de la ciudad , el templo de la Sagrada Familia,  así como la visión de la ciudad misma por donde pasará el papa el día 7, y la imagen misma de Catalunya; es decir, todo lo que aparecerá, se comentará y será visto en directo gracias a la Televisión con ocasión de esta visita. Ciertamente, a nivel apostólico, en visión de creyente, no debería ser éste el motivo principal para alegrarse por la visita de un papa a la ciudad de Barcelona; pero con ojos de agnóstico, crítico con la iglesia, ateo o persona que sólo mire el bien común de esta sociedad barcelonesa y catalana, pocas cosas (o quizá ninguna) podría tener en este momento un alcance tan mundial, amplio y de interés como esta visita comentada sin duda por cientos de periodistas, seguido por todas las televisiones más importantes del mundo que quizá, dicen, llegará de una forma u otra a más de mil millones de personas en todo el planeta.

Basta ir por el mundo y ver cómo niños de todo los lugares, desde sitios extremos de chabolas en países africanos, sudamericanos, asiáticos… reconocen y hasta llevan una camiseta del barça; ¿a qué se debe eso?  Sin duda a que han visto por televisión algún partido; se les han regalado algunas camisetas…etc. (Me llamó la atención el dar algunas charlas a estudiantes o maestros en la selva boliviana y que algunos de los oyentes –aymaras en una ocasión, quechuas en otras- llevasen una camiseta del barça el pasado año…). Imaginemos ahora lo que será la Sagrada Familia en el centro de las televisiones de más de medio mundo; el Papa hablando en una lengua algo desconocida para muchos como es el catalán y con vistas aéreas de nuestra ciudad, de Catalunya y seguramente aprovechando el evento para hablar de la cocina catalana, el arte, el deporte, la lengua, la cultura de este país... Es difícil imaginar lo que muchos van a saber de estas tierras y lo que ello va a representar para todos nosotros e incluso para España entera.

Ya se habla de que van a aumentar considerablemente en los próximos meses las visitas a la ciudad de Barcelona, y a la Sagrada Familia en particular,  de tantos que se limitan a viajar a la costa brava o lugares similares sin pasar por la capital catalana. En este sentido habría que recordar que la Sagrada Familia es el monumento más visitado de España (por encima de los monumentos de Granada, de la mezquita de Córdoba, de las grandes catedrales españolas o de cualquier otra construcción artística de España). Puede suponerse en qué medida se incrementarán estas visitas seguramente…

Sé que estoy mezclando diversos temas; pero esto no es un libro, y aun sin orden y concierto, puede ser  interesante mencionar estas cosas para tener una visión más amplia del evento. Por lo tanto, aunque sigo sin ver a qué venía ahora esta visita y aun no siendo partidario por diversos motivos de la necesidad o conveniencia de este viaje (quizá en otro momento explicite más todo ello), ya que se da este viaje y se realiza este evento, veamos lo positivo que pueda tener y no hagamos demagogia de lo costoso de algo así. En resumen: creo que este viaje papal y lo que ha significado nos ha salido, a nivel económico muy bien  a los españoles y a los catalanes; dado que en términos propagandístico, de reconocimiento, y de turismo va a ser algo de gran importancia. Desde luego más que la visita de la Sra. Obama y su “nena” a la que aludía en el escrito anterior.

Se dijo en su momento, que unas personas de tal importancia en el mundo (esposa e hija del hombre quizá  más importante de la tierra) debían ser consideradas en su justa medida y cuidarse dicha visita de los Obama al máximo. Pero yo digo ¿es que cuando la Sra. Obama le pedía a su esposo, hace unos años, aun no siendo presidente de EEUU, que al volver a casa le trajera un “matacucarachas”, tenía esta señora alguna idea de lo que era Granada o la costa levantina? Ciertamente quizá ni sabía dónde estaba la costa levantina y si Granada estaba en Asia, África u Oriente Medio, como les ocurre a la mayoría de los norteamericanos, incluso a algunos de cierta cultura. Y, poco tiempo después, ¿era tan necesaria esa visita que ella realizó a nuestras tierras? Creo que no. Si me lo hubieran consultado (por suerte para mí y seguramente para ellos, no tiene sentido suponer que eso hubiera podido haber sucedido) le hubiera dicho a la Sra. Obama,  qué se quedase aquellos días quietecita en su enorme casa Blanca por un cierto tiempo (ya se dice por ahí que quizá ni pueda optar a un segundo mandato por lo que quedará libre en breve tiempo, lo que siento porque seguramente le seguirá un presidente menos positivo, esperemos que no de la línea del Sr.  Bush, y todos perderemos con ello). Y le hubiese recomendado además que esperase ya que tiempo tendrá en 2 años (o quizá como máximo en 5-6 de  hacer turismo toda la familia junta, con mayor tranquilidad,  que bien merecido lo tendrán…

Como puede verse, este viaje de la Sra. Obama me pareció, como mínimo, un viaje algo “tontorrón”; en su momento así lo juzgué, pero sólo lo saco ahora a colación porque me molesta que ahora, ante un viaje muchísimo más trascendental para Barcelona, para Catalunya, para España, incluso,  para los creyentes de este país y para el conocimiento mundial del mismo, quienes hace bien poco se mantenían “quietecitos” y callados, ahora, sea por la proximidad de las elecciones catalanas, las de ayuntamientos y hasta generales, tengan que  movilizarse por este otro viaje, menos costoso y más esencial para tanta gente.

Y siguiendo con el asunto central que nos ocupa. Indicar que ya sabemos que el Papa dispondrá de una hora, además de las 2-3 dedicadas a la Sagrada Familia, para, antes de irse a Roma, visitar un Centro de la iglesia de discapacitados,  atendidos, fundamentalmente, por religiosas, voluntarios y creyentes.

Puede ser todo un símbolo. Quizá ahora algunos sepan que aproximadamente en los mismos años en que se iniciaba la insigne obra de Gaudí que se inaugura al culto el día 7: la Sagrada Familia, es decir a fines del siglo XIX, en Barcelona también otras personas más anónimas y por lo menos más desconocidas que aquellas iniciaban una obra sencilla, pobre incluso, sin medios, que nadie quería realizar… Es decir,  en un momento en que tener hijos disminuidos  se tenía por una lacra o por lo menos nadie se preocupaba por ellos, se creó un centro de atención a niños y adultos discapacitados que el Papa también visitará en la tarde del día 7 en Barcelona,  antes de volar para Roma.

Han pasado otros tanto años (más de un siglo) y unas religiosas católicas y unos cuantos trabajadores o voluntarios, representativos de otros muchos que durante años y años han atendido a quienes nadie quería atender, siguen al pie del cañón cuidando a niños y adultos, con afecto y atención como nadie con ellos; pero unos y otros –discapacitados y cuidadores- eran olvidados de todos. Esa sí es una actividad que muy pocos o casi nadie ha conocido en el mundo, aunque se lleven  125 años de arduo trabajo… Cuando muchos padres escondían y casi camuflaban a sus hijos disminuidos o con deficiencias, miembros de esta iglesia católica, hoy día tan denostada por muchos, lo mejor de sus miembros (algunas religiosas anónimas, seglares anónimos, personas bondadosas) atendían a personas que para la sociedad no contaban; por lo menos así ha sido hasta tiempo muy reciente.

El Papa, no lo olvidemos, si hemos de ser sinceros hay que aceptar que no viene exactamente  a visitar a estas personas, a esta institución, a su trabajadores, internos…;   no viene el Papa a ver a estas personas, sino que viniendo para otro evento, DE PASO,  les visitará. Pero aún así, ha sido acertada, creo yo, esta visita de la tarde del día 7. Porque esta obra es una de las mejores que puede presentar como enseña de su ser la iglesia católica. Hace poco oí decir a un teólogo :

EL evangelio viene de Jesucristo. La religión no viene de Jesucristo

Hay que partir de una distinción básica que ahora varios teólogos ya han propuesto entre el evangelio y la religión.

El evangelio viene de Jesucristo. La religión no viene de Jesucristo. El evangelio no es religioso. Jesús no ha fundado ninguna religión. No ha fundado ritos; no ha enseñado doctrinas; no ha organizado un sistema de gobierno… nada de eso. Se dedicó a anunciar, promover, indicar  el reino de Dios. O sea, un cambio radical de toda la humanidad en todos sus aspectos. Un cambio cuyos protagonistas fundamentales debían ser los más pobres, los pequeños, los insignificantes… en definitiva, los que no cuentan para la sociedad. Se dirige a los pobres pensando que solamente ellos son capaces de actuar con esa sinceridad, con esa autenticidad para promover un mundo nuevo.”

Hasta aquí unas palabras -algo arregladas por mí, pero sin variar su contenido- de un teólogo del que quizá hablaré; y  si no de él, sí del tema en otro contexto y en otra ocasión, pero en lo que estoy de acuerdo en bastantes cosas. Todo esto puede aclarar un poco algunas de las cosas dichas. Por que, si somos sinceros, en esta visita del Papa se dan, como decíamos al principio, dos acontecimientos: el del Jefe de estado y el de la visita a los creyentes que quieren se inaugure un templo y los que creen que su fe les impele a promover actividades como la que visitará el papa en la tarde del día 7.

Por ello, como Jefe de Estado, quizá las cosas están excesiva e innecesariamente  politizadas en el sentido antes dicho. Pero como Cabeza visible de Jesucristo, la bendición del templo, podría darse o no, pero la visita al centro de religiosas y voluntarios, es de lo más normal y evidente…

Sea lo que sea de todo este asunto, el viaje ya lo tenemos a la vuelta de la esquina. Curiosamente me da la impresión que muchos emigrantes, personas en paro mayoritariamente, pobres, que están ya pensando en regresar a sus países de origen sobre todo latinoamericanos (bolivianos, ecuatorianos, peruanos… que son mayoritariamente creyentes católicos) disfrutarán viendo la venida de este papa ya que para ellos representa mucho más que para otros. Es curioso que otros que tanto discuten este evento estarán en sus cómodas casas, me refiero a algunos politiquitos, criticando el viaje.

Y por lo que se sabe ya, el presiente del gobierno español, aludiendo a su condición de no creyente y por lo tanto no católico y menos aún practicante, no acudirá  a la bendición-inauguración del templo. Y me parece una auténtica tontería, aunque seguramente se ha calculado por él o mejor aún por sus consejeros si a nivel de obtención de votos convenía acudir o no. Y creo que le deben haber aconsejado no muy bien, creo que equivocadamente, al pensar que son más los votos que en un momento dado puede obtener si no acude que los que ganaría si acudiese. Pero no es de eso de lo que se trata. En un acontecimiento de esta índole, ser representados por la más alta autoridad de España ayudaría a cerrar algunas heridas y roces que últimamente se han dado.

Porque, veamos el tema aunque sea de paso: si se despidiese o enterrase a una alta autoridad de Catalunya,  y aún más si fuese de su partido y tal personaje fuese católico ¿es que el Presidente del país no acudiría a su entierro por no ser él  creyente? ¿Es que muchos no nos hemos puesto más de una vez por respeto un pequeño cubrimiento en la cabeza para poder entrar en una sinagoga simplemente por amor a lo artístico y cultural en muchos sitios de Europa, aun no siendo judíos? Sea como sea que quiera verse, pero un templo católico, budista, judío o una ceremonia similar, no debe de ser despreciada de esta forma… Por ello, lo que sí es cierto, es que algunos de su “amiguetes” y consejeros no saben de qué va el invento, ya que el atormentado señor Zapatero (yo prefiero llamarle señor Rodríguez, ya que nunca he entendido a qué viene ese cambio de apellidos que no le hace mejorar mucho que digamos) -por lo de la crisis digo eso de “atormentado”-no va a tener un premio como gestión política y forma de agradecer a los catalanes que le hayan permitido tener un seguidor suyo en el más alto cargo de la Generalitat de Catalunya. Al tiempo!

Seguramente a estas alturas ya se ve perdida la plaza de la Generalitat para su partido y se busca obtener algún rendimiento haciendo un guiño a quienes están más alejados del mundo de las creencias… De todas formas, mucho me temo que su deseo era el de venir; pero debe de tener un gran temor a recibir el abucheo casi general de quienes ese día celebren tal acontecimiento. Se habla de que algunos detractores del papa piensan moverse en su contra, ¿tanto teme el Señor Rodríguez Zapatero que no puedan hacerlo contra el papa mayoritariamente  y sí contra él? Ahí queda la pregunta…

Para terminar (hay tanto que decir alrededor de este acontecimiento, pero no quiero aburrir a las ovejas con este largo escrito), decir que sí me hubiera gustado haber sido invitado, pero no para ver de cerca de autoridades, personajes, cardenales…, sino el templo lleno a rebosar, oír la música que ese día será esplendorosa con más de un millar de cantantes… PERO SOBRE TODO, para poder ver, por la tarde, la cara de esos niños y adultos “diferentes”, familiares, voluntarios y religiosas de esa institución que el Papa visitará y a los que su visita llenará la vida por unas horas de GOZO inmenso; no en balde desde que supieron de esa visita llevan semanas preparándola y procurando que ese acontecimiento les salga perfecto con una felicidad muy grande. Ellos piensan que les ha tocado la lotería, como alguien comentaba recientemente. Si no me invitan en ese día (y no tienen por qué hacerlo porque ni saben que existo ni tengo nada directo que ver con ellos) si que es posible que algún día les visite yo, y hasta colabore con ellos si me lo permiten como voluntario, cuando ya nadie se acuerde que un Papa, el llamado Benedicto XVI, estuvo allí unos meses atrás…

Perdón por el desorden en lo aquí tratado. Escribo todo esto horas antes del día 7 de noviembre, antes de que el Papa inaugure la Sagrada Familia Otras cosas que ya dice la Prensa y todo sabemos, no vale la pena comentarlas. Estas tres o cuatro que he comentado aquí y en el escrito anterior, quizá a alguien le den pié para pensar –y/o decir- algo al respecto. Estaría bien que así fuera. Hasta pronto; espero decir algo de lo que vea el día 7 a través de la televisión….